QUIEN SIGUE MIS PASOS

                                                         

Siendo un niño comencé a darme cuenta que nunca me encontraba solo, siempre percibía una presencia que los demás no captaban y que nunca entendí porque me hacía sentir   seguro.

Recuerdo la primera vez que monte en bicicleta tenía seis ( 6 ) años y la estatura mía era muy pequeña para las ciclas de la época , pero en el fondo de mi mente alguien decía puedes hacerlo no temas es bastante sencillo y así fue ; tome el vehículo de papá y desde un punto de florida que le llaman el Cristo que en esa época era el primer barrio de ingreso a la ciudad llegando desde Cali , Salí  con dos amigos más uno llamaba Hildebrando y el otro Carlos , pedalee  y pedalee hasta llegar a un ingenio azucarero donde trabajaba mi papá y al llegar la voz nuevamente me indico como parar y descender de tan alto vehículo para mi estatura .

Ya en la noche cuando le comente a mi madre ella no lo podía creer pero ahí estaban mis dos amigos que lo confirmaron sin saber cómo lo había hecho y fue la primera vez que la dije a mamá  que alguien me explica cómo hacer las cosas, pero ella no le dio importancia y paso como una fantasía de niño pequeño.

Me faltaban dos meses para cumplir siete ( 7 ) años cuando por primera vez ingrese a una piscina en un lugar denominado el Pedregal en la ciudad de Florida que era el lugar donde vivía mi familia en la época en que ocurrieron estos acontecimientos.

Yo miraba y miraba como los adultos se tiraban de un trampolín de casi dos metros de altura y de pronto la voz a mi costado dijo es divertido y puedes intentarlo nada va a pasar y sin pensarlo mucho subí  al trampolín y me lance a la piscina ante el asombro de mi familia que aterrorizados pensaron y gritaron que me ahogaría, pero ante la sorpresa de todos Seguí  nadando y Salí con la intención de hacerlo nuevamente ante la incredulidad  de todos que ante tal acto no les quedo más que aplaudir y lanzar vivas .

Mi abuela quien era para mí la persona más cercana ya que me entendía mucho más que mamá y papá , decía hijo, no temas que esas  cosas solo Dios las puede entender y si él las permite están bien.

Y así fue como durante toda mi vida he tenido esa sensación de escuchar cuando un lugar es peligroso o no o cuando debo hacer algo que ni siquiera se me ha ocurrido.



En una población cercana 58 kilómetros de Cali que es el lugar donde vivo actualmente cuando nació uno de mis hijos, con mi esposa decidimos que lo registraríamos en Cali y decidimos ir una notaria de esa ciudad ya que él había nacido en ese lugar .Salimos todos de la casa con la intención de viajar y la esposa aun en dieta `.cuando llegamos a la terminal de transportes un microbús estaba listo para salir e intentamos subir pero en el instante alguien me dio un tirón y no alcance a subir y una voz me repetía no ,no , no , yo los mire y dije no viajamos aun , con gran incomodidad mi esposa repetía que estaba muy lleno de requeñeques que viajáramos ahí , y  decidimos al  fin que no en ese vehículo que aunque llegáramos tarde nos iríamos en el  próximo.

Así  fue salimos en el bus siguiente un destartalado y antiguo bus enorme , a los diez (10) kilómetros aproximadamente vimos que la buseta estaba accidentada y habían fallecido varias personas.

Nos miramos y yo le dije se fija que no son requeñeques.


Estando una vez en el centro de la población íbamos caminando cuando a mitad de la cuadra sentí la voz que decía regresa ,regresa, regresa  y les dije devolvámonos y nos vamos por la cuadra anterior y todos se alteraron que como si ya estábamos finalizando la cuadra hasta que a regañadientes nos devolvimos y cruzamos por la esquina anterior ; cuando llegamos al final de la cuadra anterior vimos que en esa esquina por donde debíamos haber pasado si hubiéramos continuado caminando, había una gran cantidad de gente aglomerada y  preguntamos  qué  paso y las personas contestaron en esa esquina mataron a bala a alguien y se estrello un vehículo también hiriendo varios transeúntes .Todos me miraron pero nadie opino nada.

Y así han sido innumerables los acontecimientos donde he sentido que no soy yo es alguien que se da cuenta de lo que va a pasar y me advierte.

Es por eso que siempre pienso que No estamos solos y que alguien sigue nuestros pasos, y que seguramente no hemos aprendido a  escuchar  esa voz interior.